Una nuevo opción para la supervivencia de la raza humana podría estar en el planeta K2- 18b, el cual fue descubierto a finales del 2017 pero en días recientes, un grupo de astrónomos del University College de Londres confirmó que en su superficie se encontró agua, haciéndolo un planeta potencialmente habitable.
Este planeta está situado a 110 años luz de la Tierra en la constelación de Leo y está catalogado como un tipo de planeta conocido como supertierra, es decir, un mundo más grande que el nuestro, pero lo bastante pequeño para tener una superficie con continentes y océanos. Tiene un diámetro del doble que la Tierra y una masa ocho veces mayor.
Las exploraciones de esta investigación se hicieron a través del telescopio espacial “Hubble”, por lo que se pudo deducir que el planeta K2-18b se encuentra en la llamada zona habitable, allí donde la temperatura permite la presencia de agua líquida en la superficie.
Aunque no se sabe cuál es su temperatura exacta, ya que depende de factores que se desconocen como el porcentaje de radiación que el planeta refleja al espacio, “debe ser similar a la de la Tierra”
Según los resultados presentados, se detectó una señal inequívoca de vapor de agua, así como la presencia de hidrógeno y helio. También es posible que haya nitrógeno y metano, ambos presentes en la atmósfera de la Tierra, aunque el Hubble no tiene capacidad de detectarlos. Se trata de la primera vez que se consigue caracterizar la atmósfera de una supertierra en la zona habitable.
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