Tu nombre escrito a mano en el vaso de tu bebida favorita: ¿será suficiente para hacer de Starbucks tu lugar de preferencia otra vez?
El nuevo CEO de Starbucks, Brian Niccol, ha presentado un plan para revitalizar la cadena en medio de una crisis de identidad y una caída en las ventas. Durante su primera llamada con analistas, Niccol destacó su objetivo de devolver a Starbucks su esencia como un lugar acogedor y con un toque personal, donde los clientes se sientan bienvenidos.
Una de las primeras iniciativas será volver a utilizar tazas de cerámica en las tiendas para quienes deseen quedarse: «Queremos que nuestros clientes disfruten de la experiencia, no solo del café», afirmó Niccol.
Además, Starbucks retoma la práctica de escribir el nombre del cliente en los vasos, utilizando marcadores Sharpie. La empresa ha adquirido 200,000 de estos plumones para sus 17,000 tiendas en Estados Unidos, buscando así añadir un toque personal en cada bebida.
Otra de las decisiones de Niccol incluye la congelación de precios en el menú de tiendas propias en Norteamérica y la eliminación temporal del recargo por opciones de leche no láctea, como soya y avena, reduciendo así los costos de quienes optan por estas alternativas.
Starbucks registró una caída del 6% en las ventas de sus tiendas en Estados Unidos el último trimestre. Sin embargo, el nombramiento de Niccol ha generado optimismo, con un alza de más del 25% en las acciones de la compañía desde su llegada. Con este enfoque en personalización y calidez, Niccol espera recuperar la conexión con los clientes y revitalizar la icónica marca de café.