• Sáb. Abr 19th, 2025

Trump regresa a la Casa Blanca: un nuevo capítulo de incertidumbre para EE. UU.

El regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos ha sacudido tanto a los sectores políticos como a la ciudadanía, marcando un histórico retorno al poder después de haber sido destituido en las elecciones de 2020. Su victoria sobre Kamala Harris se consolidó al captar el apoyo de millones de votantes que, impulsados por temores económicos y preocupaciones sobre migración, apostaron por un cambio radical en las políticas del país. En su segundo mandato, Trump promete una transformación completa del sistema, caracterizada por un enfoque de aislamiento en las relaciones internacionales, un reforzamiento de la seguridad fronteriza y una nueva ola de aranceles con la que pretende revitalizar la industria nacional.

La campaña de Trump se centró en posicionarse como defensor de los intereses estadounidenses frente al «establishment» y las élites, apelando a la desconfianza generalizada hacia las instituciones y el sistema político. Durante los días de campaña, Trump prometió que su retorno al poder no solo traería un ajuste de cuentas político, sino también una era de retribución que afectaría tanto a sus opositores como a aquellos que considera «enemigos internos». A pesar de su historial legal y las acusaciones en su contra, su mensaje resonó fuertemente entre los votantes, especialmente entre los sectores de clase trabajadora, sumando además a una significativa base de latinos y afroamericanos.

Para el país, el regreso de Trump plantea un sinfín de incertidumbres, desde el rumbo de la economía y la postura frente a conflictos internacionales, hasta el futuro de la democracia en sí misma. Su primer mandato fue conocido por su carácter disruptivo y divisivo, y su retorno podría significar un endurecimiento de políticas, como el aumento en las deportaciones y una retirada gradual de compromisos internacionales. Mientras sus seguidores celebran este giro como una esperanza de recuperar los valores tradicionales y de justicia, sus detractores advierten que su liderazgo podría erosionar la confianza en la democracia y los principios fundamentales del país.